La actitud negativa que tienen los mazahuas acerca de su cultura y su lengua les provoca antivalores, falta de identidad social y étnica, lo que les genera una baja autoestima que da como resultado la negación de su propia identidad étnica.Pero esta actitud negativa se puede superar cuando los propias mazahuas se den cuenta de que a pesar de más de 500 años de contacto cultural y lingüístico y de colonialismo, su cultura y su lengua persisten, aunque hayan sido agredidas, ignoradas, silenciadas y prohibidas […] Se trata de tomar conciencia de que, a partir de la lengua, se construye la cosmovisión de todo grupo humano, ya que la lengua contiene y aporta valores éticos, morales y culturales que la población originaria no quiere abandonar...
Mazahua ¿De dónde viene la palabra y cuál es su significado? Al finalizar este breve texto, sabrás la respuesta a estas preguntas y un poco más.
Autor: Alejandra Álvarez.
Variante lingüística: jnatjo <mazahua de occidente>.
Lugar: Indígenas migrantes a la ciudad de México, del Municipio de Zitácuaro de la zona de Crescencio Morales, Michoacán.
En la década de 1470, el poderoso imperio mexica, bajo el reinado de Axayácatl, logra conquistar el valle de Matlatzinco, una región que comprendía el valle de Toluca y sus alrededores. Pero, ¿quiénes habitaban ese valle? Lo habitaban hablantes de lenguas otomianas, es decir otomí, mazahua, matlatzinca y ocuilteco; la zona donde se concentraban los mazahuas, dentro del gran valle de Matlatzinco, era el valle de Ixtlahuaca1.
Como respuesta al nuevo dominio mexica, algunos de los pobladores originales emigraron hacia Michoacán. Los que se quedaron, se sometieron a un complejo sistema de tributos, servicios y repartos de tierras. A su vez, se asentaron en el área mexicas de la Triple Alianza para repoblar las tierras conquistadas y el náhuatl, siendo el idioma del imperio, se impuso como la lengua de prestigio2.
Autor: Alejandra Álvarez.
Variante lingüística: jnatjo <mazahua de occidente>.
Lugar: Indígenas migrantes a la ciudad de México, del Municipio de Zitácuaro de la zona de Crescencio Morales, Michoacán.
Un testimonio importante de este hecho histórico, y que perdura hasta la actualidad, son los etnónimos (nombre que recibe una etnia) con los que ahora conocemos a pueblos ancestrales: matlatzinca, otomí o mazahua; palabras que el español tomó prestadas del náhuatl para identificarlos. Por ejemplo, mazahua se compone de dos palabras nahuas: [masaː] que significa venado y [waɁ] que significa dueño. Otro testimonio que registra nombres nahuas son los libros de bautizos, pertenecientes a la época de la colonia, lugares que se sabe estaban (y algunos aún lo están) habitados en su gran mayoría por mazahuas3. Es curiosa la tendencia a nombrar a las personas en la lengua de prestigio, como las personas que toman nombres del inglés o del francés para llamar a sus hijos. De hecho, la nobleza nahua también los hacía, después de la conquista española, tenían nombres y apellidos españoles y, los que no pertenecían a la nobleza, llevaban algunas veces nombres españoles, pero apellidos indígenas4.
Autor: Alejandra Álvarez.
Variante lingüística: jnatjo <mazahua de occidente>.
Lugar: Indígenas migrantes a la ciudad de México, del Municipio de Zitácuaro de la zona de Crescencio Morales, Michoacán.
Con estos ejemplos puedes observar la jerarquía lingüística de prestigio que se estableció durante la colonia: primero el español por ser la nueva lengua imperial, el náhuatl como lengua mayoritaria, y después las lenguas minoritarias, como el caso del mazahua5.
Ahora, dejemos en claro algo, que haya sido una lengua minoritaria no significa que sea menos importante; el mazahua proviene nada más y nada menos que del proto-otomangue. Se calcula que el territorio original de los hablantes del proto-otomangue estaba en el valle de Tehuacán, Puebla. En ese lugar se han encontrado restos arqueológicos de distintas especies de maíz, y todas las evidencias arqueológicas apuntan a que en esa tierra se doméstico el maíz, la planta más importante para las culturas mesoamericanas, que como sabemos, es uno de los principales cultivos a nivel mundial. También se cree que en ese valle empezó a diversificarse la familia oto-mangue, gracias a las migraciones. Parece ser que la rama otopameana (a la que pertenece el mazahua), fue la primera en separarse, debido a que los hablantes de proto-otopamenano migraron hacia el Altiplano Central de Mesoamérica, donde se construyeron metrópolis como las de Tlatilco, Cuicuilco, Teotihuacán, Tula, entre otras. Esta rama a su vez se dividiría en otras dos proto-lenguas: el proto-otomiano y el proto-pameano. Antes de continuar, es importante aclarar que utilizamos la palabra proto para indicar que alguna vez fueron lenguas que se hablaron y que dieron origen a otras lenguas, pero no se tiene ninguna evidencia de cómo fueron, solo se hacen reconstrucciones probables de cómo pudieron haber sido. Algunos investigadores sostienen que los descendientes del proto-otomiano como los mazahuas, otomíes, matlatzincas y ocuiltecos jugaron un papel importante en la construcción del pensamiento mesoamericano6.
Los mazahuas actuales, siguen habitando los territorios ancestrales, aunque de forma distinta, su distribución es diferente, su territorio ha sido reducido, pero también han ocupado otros espacios; conservan formas de vida, y muchos aún hablan su lengua, legado y testimonio de su recorrido histórico.
Autor: Alejandra Álvarez.
Variante lingüística: jnatjo <mazahua de occidente>.
Lugar: Indígenas migrantes a la ciudad de México, del Municipio de Zitácuaro de la zona de Crescencio Morales, Michoacán.
Respecto a su idioma existen dos variantes lingüísticas: el mazahua del oriente y el mazahua de occidente, o como sus hablantes lo nombran: Jnatrjo y Jnatjo respectivamente; las dos variantes se hablan en el Estado de México y Michoacán, y se puede decir que en conjunto, por lo menos hasta el 2010, suman alrededor de 136,717 personas hablantes de mazahua.
La historia del pueblo mazahua es un tema apasionante. En este breve texto podemos observar como los mazahuas, junto con otros pueblos hermanos, son descendientes de civilizaciones antiguas, y han heredado conocimientos ancestrales; muchos se han perdido en el tiempo, pero muchos otros perduran, otros se reconstruyen y se reinventan. El pueblo ha sabido sobrevivir a la violencia de distintas guerras y conquistas, y gracias a su resistencia, continúan.
1 Knapp, Michael H., Doctrina y enseñanza de la lengua mazahua: Estudio filológico y edición interlineal del texto de Nájera Yanguas, México D. F.: INALI, 2013, p.36.
2 Loc. cit.
3 Knapp, Michael H., op. cit. p. 41.
4 Loc. cit.
5 Knapp, Michael H., op. cit., p. 43.
6 Celote Preciado, A., Presentación, en Knapp, Michael H. Doctrina y enseñanza de la lengua mazahua: Estudio filológico y edición interlineal del texto de Nájera Yanguas. México D. F.: INALI, 2013, p. 11.
Mapa variantes Mazahua
Presiona para acercar